El estado de Puebla vive un momento acelerado en las actividades y productos turísticos que se ofrecen porque emergió como un polo de desarrollo con un incremento de 3.9% en la llegada de viajeros y una derrama económica 7% arriba respecto al año pasado, informó Francisco Javier Ruiz Hermoso, director de la Escuela de Turismo y Gastronomía de la Universidad Anáhuac Puebla.

Destacó que las particularidades se observan en el centro histórico de la ciudad que es Patrimonio Cultural de la Humanidad lo que permite ofrecer una arquitectura única en su tipo bien conservada, con una gastronomía tradicional, sitios arqueológicos milenarios como la pirámide de Cholula, balnearios, sitios naturales, pueblos mágicos, entre otros atractivos, que atraen al visitante.

Resaltó que en los últimos años el turismo religioso ha tenido un impacto importante, sobre todo, en el periodo de Semana Santa con las actividades tradicionales de la procesión del Viernes Santo, que ha permitido incrementar la estancia de las familias que visitan la ciudad.

En este sentido, refirió que Puebla como ciudad colonial debe mantener estos elementos que le permiten estar en la preferencia de los visitantes, por lo que el tipo de turista que llega a la ciudad quiere conocer los sitios históricos, pero sobre todo, comer los platillos típicos tradicionales como son las chalupas, cemitas, el mole y los tradicionales chiles en nogada que son de temporada.

Argumentó que las políticas del nuevo gobierno estatal se deben enfocar en mantener la derrama económica y el incremento en el número de visitantes con propuestas creativas que permitan la llegada de un mayor número de visitantes ya que se cuenta con una importante infraestructura hotelera en la ciudad y municipios importantes.