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- Puebla, Pue. México.

A raíz del triunfo de Jaime Rodríguez como candidato independiente a la Gubernatura de Nuevo León, con un importante apoyo de los grandes grupos empresariales de Monterrey y de otros estados que vieron en él a un líder con gran respaldo ciudadano, que se reflejó en la votación que obtuvo sobre los candidatos de Acción nacional y del PRI, se ha desatado a nivel nacional lo que algunos analistas han denominado la “Broncomanía”.

Y es que ante el hartazgo e inconformidad que existe entre diversos grupos de la sociedad mexicana en contra de los partidos políticos y funcionarios de los tres niveles de gobierno, la tendencia ahora —no sólo de los militantes de los partidos y de los grupos corporativistas de los mismos— es tratar de borrar su pasado partidista y desmarcarse de quienes en otras épocas les apoyaron para hacer una carrera política.

01sociedad01En este sentido, la falta de democracia en el interior de los partidos, atrapados en la lucha de los grupos y tribus que los han controlado por décadas, ha propiciado la salida de cuadros importantes que hasta antes del reconocimiento de las candidaturas independientes, decidían emigrar hacia otras expresiones políticas para hacerse de una candidatura; muchos de ellos logrando triunfos en contra de las instituciones políticas que antes los cobijaron y ejemplos hay muchos en procesos electorales, tanto de presidencias  municipales, gubernaturas y de elecciones de diputados y senadores.

Otro de los fenómenos que se ha dado a raíz de estas situaciones ha sido la renuncia de Legisladores de los grupos parlamentarios, para declararse como “independientes” o adherirse a otros grupos para continuar su carrera con otros. De ahí que, seguramente en los próximos procesos electorales y ante la real posibilidad de que los políticos puedan ganar posiciones como “candidatos independientes”, viviremos en México una “broncomanía” galopante, es decir, lograrán mayor credibilidad quienes se postulen  por sí 01sociedad02mismos  a un cargo, que quienes lo hagan bajo las siglas de un partido político, ya que uno de los factores que llevarán en contra son la percepción, falta de credibilidad y mala  imagen que tengan los electores sobre el actuar de sus líderes y autoridades; en este momento, ya nadie confía en nadie y todos somos sujetos de desconfianza.

El destape de Margarita Zavala, quien esta semana anunció que de acuerdo a los tiempos que marca la legislación electoral buscará la candidatura a la Presidencia de la República, ya puso nerviosos a más de tres suspirantes, que aún no habían hecho pública su intención de buscar dicho cargo, entre ellos al Gobernador de Puebla, Rafael Moreno Valle Rosas, por el PAN; el jefe de Gobierno del Distrito Federal por el PRD; y en las últimas horas —en forma velada— Luis Videgaray con el respaldo del Presidente y en esta carrera, aun y cuando falta mucho para el 2018, se recrudecerá la lucha al interior de los Partidos: primero por hacerse de las dirigencias nacionales y estatales; y después por la búsqueda de las alianzas que les permitan llegar fortalecidos al proceso.

01sociedad03Mi teoría es que, ante el control de la dirigencia nacional del PAN que seguramente logrará el gobernador poblano con Ricardo Anaya como su candidato, le serán cerradas las puertas a Margarita Zavala como la propuesta del calderonismo; así como a Gustavo Madero, quien prácticamente ha cedido el control del Partido al grupo morenovallista, de ahí que con la asesoría del expresidente Felipe Calderón, seguramente Margarita Zavala saldrá como candidata independiente, tratando de bajar las preferencias que tiene en este momento Andrés Manuel López Obrador con Morena, si los panistas —entre ellos RMV—, no visualizan esta jugada de tres bandas, es porque no conocen al expresidente, o bien porque piensan que con tener el control de Acción Nacional es suficiente para ganar la elección presidencial.