La tarjeta de crédito por sí misma no es un problema. Los problemas pueden surgir al hacer un uso indebido (inadecuado) y para ello el Decálogo es una pauta que permite fácilmente a quién lo sigue, hacer un uso adecuado del plástico.
Antes de contratar
1.-Compara entre las diversas tarjetas. No todas cuestan ni ofrecen lo mismo. Elige la que se ajuste a tu capacidad de pago y procura tener sólo las necesarias.
2.-Infórmate sobre las tasas de interés, comisiones, Costo Anual Total (CAT), respaldo en caso de robo o extravío, seguros asociados, beneficios y responsabilidades.
3.-Antes de firmar lee tu contrato. Aclara cualquier duda con el asesor y recuerda que el banco te debe entregar un folleto explicativo junto con tu contrato a la entrega del plástico.
Si ya la tienes
4.-Aprovéchala para facilitar tus pagos o para cubrir urgencias o sucesos inesperados. La tarjeta de crédito es de gran ayuda, si la utilizas dentro de tu presupuesto y línea de crédito autorizada.
5.-No la consideres dinero extra para gastar por arriba de tus posibilidades. Si comienzas a utilizarla para tu consumo diario, puedes acumular una deuda que después te resultará difícil de pagar.
6.-Cubre puntualmente tus pagos. Cada vez que dejas de pagar a tiempo aumenta tu deuda y puede derivar en un registro negativo en tu historial crediticio.
Para reducir tus saldos
7.-Abona más del pago mínimo mensual señalado en el estado de cuenta para reducir el monto y plazo de tu deuda, y mantener el control.
8.-Recuerda que puedes consolidar tus deudas en la tarjeta que te ofrezca la menor tasa de interés. Si tienes problemas de pago, déjala de usar.
9.-Cancela la tarjeta que no uses.Tu banco te debe indicar el proceso para hacerlo.
Recomendaciones
10.-Revisa siempre el estado de cuenta. Conserva tus comprobantes. En caso de errores u omisiones, tienes un plazo de 90 días a partir de la fecha de corte para presentar aclaraciones.Por robo o extravío, repórtala inmediatamente.
Con información de: http://www.economia.com.mx/