Hola amigos, en esta época del año cuando está lloviendo uno generalmente piensa en lo incómoda que puede ser la lluvia ¡qué lata está lloviendo ya se arruinaron mis planes de salir! Es una frase que escuchamos con frecuencia, pero pocos nos detenemos en pensar sobre los beneficios de la lluvia para la agricultura.

     En nuestro país un porcentaje considerable de las tierras utilizadas para sembrar y cosechar alimentos  lo hacen mediante el régimen de temporal. Es decir están a la buena de Dios, debe llover moderadamente  -ni tan poco que se seque las plantas ni mucho que inunde las parcelas- Pobres de nuestros campesinos realmente llevan la peor parte, el solo hecho de decidir cuándo sembrar es el primer gran riesgo que asumen.

     Si el clima no es benévolo en unas cuantas horas pueden perder sus cosechas si de casualidad graniza o bien si es un año muy seco en el que la lluvia no nos ayude. La humanidad crece y crece y nuestra capacidad para producir alimentos no lo hace al mismo ritmo es por ello que necesitamos mejorar nuestra productividad agrícola y para ello nuestros pequeños grandes héroes nos pueden ayudar, ellos como los boy scouts están siempre listos para ayudar.

     Aunque ustedes no lo crean de las interacciones entre los microorganismos y las raíces dependen muchos procesos y la productividad agrícola en buena medida.

     Vayámonos por partes, alrededor de las raíces  crecen un buen número de microorganismos tanto bacterias como hongos. Los hongos asociados con las raíces pueden aumentar la incorporación de fosfato hacia las plantas lo cual es de gran beneficio para el caso de las cosechas de papa y de arroz. Las bacterias también pueden producir una serie de sustancias químicas que  protegen a la planta del estrés. Las plantas que se encuentran cercanas a bacterias productoras de carbohidratos tienen  hojas más verdes y raíces más profundas.

     Algunos hongos se asocian con virus de plantas y de esta manera le permiten a las plantas crecer en suelos con elevadas temperaturas. Algunos hongos también producen sustancias químicas volátiles con efecto antibactericida sobre bacterias que son perjudiciales para la planta. Existen algunas bacterias que incluso ayudan a que las raíces asimilen nitrógeno (bacterias fijadoras de nitrógeno) y este elemento es esencial para el crecimiento de la planta.

     Todas estas capacidades han permitido suplantar al menos en parte a los fertilizantes químicos los cuales además de ser más costosos contaminan el medio ambiente. Los biofertilizantes además de ser más baratos, son amables con el medio ambiente.

     Los biofertilizantes se utilizan cada vez más en la agricultura y con mucho éxito, son como el nopal cada vez les salen más propiedades.  O como dijéramos los que gozamos de buen apetito (o sea los tragones) son más buenos que el pan de dulce.

     Los microbios son la neta del planeta, aumentan la disponibilidad de nutrientes, favorecen el crecimiento de las raíces, protegen a la planta contra el calor excesivo, las inundaciones, la presencia de sustancias tóxicas y controlan el crecimiento de algunas bacterias patógenas para la planta. Uno de los grandes retos de la humanidad es aumentar en casi un 100% la producción de alimentos de otra manera no será suficiente para alimentar las pancitas, panzas y panzotas de todos nosotros. Hasta la próxima semana. Les  pido un favor disfruten la vida y sean felices, que nada les cuesta.