Dunkirk (Dunkerque) es la décima cinta del consagrado director Christopher Nolan, creador de películas como "Inception", "Interstellar" o la trilogía de "Batman: The Dark Knight". En este film debutan Fionn Whitehead y Harry Styles, además de contar con la reconocida trayectoria de Mark Rylance (Bridge of Spies) y Tom Hardy (The Revenant). Se trata de una cinta del género bélico, situada en 1840 durante la Segunda Guerra Mundial en Dunkerque, Francia, cerca de la costa de Inglaterra, basada en los sucesos de la Operación Dinamo que tenía el objetivo de evacuar a más de 400 mil soldados.
La película narra tres historias separadas que conforme avanza la cinta se conectan. Una es la de Tommy un soldado británico (Fionn Whitehead) que busca desesperadamente regresar a casa después de una persecución en medio de fuego enemigo, donde solo él logra escapar y llegar a la costa donde miles de soldados de Francia e Inglaterra esperan ser evacuados, pues se encuentran acorralados por militares alemanes.
Otra es sobre un civil, padre de familia, (Mark Rylance) que desde Inglaterra decide zarpar en su bote junto con su hijo y su ayudante para apoyar en la evacuación de Dunkerque, a pesar de los peligros que significa dirigirse hacia esta zona de conflicto. La última historia es sobre Farrier (Tom Hardy) un piloto de un avión Spitfire, quien al lado de sus compañeros arriesga su vida para derribar aviones nazis que bombardean a los barcos de rescate. Todos tienen un mismo objetivo, salir de Dunkerque, pues el enemigo se ha mostrado superior y ya no pueden hacer nada por intentar combatir, se encuentran acorralados.
El film se caracteriza por la exaltación de los personajes logrando actuaciones innovadoras que dan un nuevo rostro al sufrimiento, al miedo y a la desesperación de la guerra. Los efectos especiales son tan bien ejecutados que ninguna situación parece exagerada, aunado al despliegue de imágenes en tierra, mar y aire y la banda sonora a cargo de Hans Zimmer que crean en el espectador demasiada tensión de principio a fin involucrándolo en la historia sin darle un descanso.
Dunkerque es una película en la que el espectador no se puede perder algún detalle, pues enlaza tres historias, en tres terrenos distintos ocurriendo en tres tiempos, en tierra son siete días los que se narran, en el mar un día y en el aire, apenas una hora, pero todas están tan bien relacionadas y sin algún hueco en el argumento, que parecen suceder al mismo tiempo. También tiene cortes de edición rápidos, pero que no llegan a ser notorios, esto podría confundir al espectador, sin embargo no es un error es la estrategia para captar toda la atención en lo que está pasando.
En la cinta no hay un protagonista en específico, el protagonista es el mismo suceso, el ambiente que se crea durante la historia, por ello no se conecta con alguno de los personajes, pero si logra hacer que se sienta que se está viviendo ese momento, otorgando tensión, angustia, miedo, y esperanza al espectador, mostrando a un enemigo tan poderoso que no tiene rostro.
Nolan nos enfrenta a los horrores de la guerra sin necesidad de ser tan crudo o sangriento pues está más enfocada a la perspectiva de sobrevivir o ser solidario. No se trata de derrotar al enemigo si no de salir de ahí, dejando en claro que no se puede hacer nada más para combatir una batalla perdida.
Dunkerque, una película bélica distinta que no habla sobre una victoria, sino sobre un escape y para expresarlo se vale del hecho mismo, de las imágenes y su sonido, no de los diálogos; donde huir no es una derrota.
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