Otra vez de regreso a clases con mucha buena vibra y emociones hasta que escuchamos a mamá diciendo frases como "es el primer día de clases, báñate, péinate, aséate, que vean que eres limpio y causes una buena impresión, aunque sea solamente hoy".
Bueno empezaremos por decir que existen algunos con espíritu de pato les encanta el baño y son felices bañándose 2 o más veces al día, otros lo hacen una vez al día por razones necesarias y otros más lo hacen obligados por las circunstancias, digamos que el agua les incomoda.
Algunos toman baños prolongados y hasta cantan, otros baños rápidos y provisionales y el promedio que no tardan mucho pero disfrutan del agua y el jabón. Pero ¿por qué es importante el baño? Pues bien a menos de que seamos recién nacidos nuestra piel está super-archi-recontra-poblada de microorganismos. Los adultos tenemos un promedio de 2 metros cuadrados de piel, es el tejido de mayor tamaño, en la piel encontramos más de 1000 especies diferentes de bacterias, se dice que tenemos más DNA proveniente de bacterias que DNA de humanos.
La mayoría de las bacterias de la piel no causan daño se conocen como miembros de la flora normal, conviven en armonía con nosotros, nosotros les damos casa, vestido y sustento y ellas agradecidas se comportan decentemente, unas pocas son malosillas y nos causan infecciones en piel o bien pueden penetrar la piel intacta y causamos daño en otros sitios anatómicos, algunas pueden entrar a través de los catéteres cuando estamos hospitalizados y causar graves infecciones. Las bacterias no están distribuidas de manera homogénea, ya que la piel tampoco es homogénea en cuanto a sus características.
Digamos que en términos generales la piel es como un desierto con zonas que asemejan arroyos y otras que son verdaderos oasis. La piel tiene zonas con grasa, zonas húmedas y zonas secas, por ello va a estar poblada por diferentes tipos de microorganismos. Pues bien imaginemos que la piel es ese desierto ya que es seca, ácida y produce sustancias antibacterianas, pero tiene zonas que son ríos o arroyos como atrás de los oídos, las axilas y en el cuello (de ahí la cinta negra en el cuello de nuestra ropa) y también encontramos oasis como la nariz y el ombligo, obviamente las bacterias van a colonizar preferentemente estos sitios húmedos y llenos de nutrientes.
Nosotros producimos sudor por diversas causas la mayoría por cuestiones fisiológicas para disminuir la temperatura corporal y eliminar algunos deshechos, algunas emociones o cuestiones hormonales hacen que sudemos más, bajo determinadas circunstancias. Nuestro sudor es inodoro, entonces ¿por qué apestamos? Bueno sucede que las responsables del mal olor son las bacterias. Las que habitan en nuestras axilas como las Propionibacterias, que a partir de los aminoácidos presentes en el sudor producen ácido propiónico (principalmente en los adolescentes), los Staphylococcus epidermis producen a partir del sudor ácido isovalérico y otras como Bacillus subtilis responsables del mal olor de los pies, mejor conocido como “olor de patas”.
El baño contribuye a mantener controladas las poblaciones microbianas, pero un exceso de lavado también perjudica ya que la piel se lastima y pierde algunas características protectoras por ello "ni tanto que queme al al santo ni tanto que no alumbre”. Aunque todos los humanos tenemos similitudes en cuanto a las bacterias que colonizan nuestra piel, pero también tenemos marcadas diferencias y por ello un olor característico debido al cual, nos reconoce nuestros perros, nuestras parejas, nuestros hijos y sobre todo nuestra mamá cuando no nos bañamos diariamente.
Un consejo "al agua patos" para que en este regreso a clases los reconozcan por su buen olor.