El objetivo de la política monetaria en México es mantener una baja inflación en el país y la meta es de 3% multianual a largo plazo para mantener estable la política monetaria sin cambios, afirmó Luis Alberto Tapia, de la Universidad del Valle de Puebla.

Pero el problema es cuando hay un choque que impacta a la economía en el corto plazo y hace que las variables observadas de la inflación salgan de sus niveles objetivo.

Actualmente hay una brecha económica
negativa por la recesión y pandemia, por lo que cada vez se separa más de esta meta, advirtió el especialista.

En este sentido, previó que en el segundo trimestre la brecha sea más negativa pero hasta la primera quincena de mayo la inflación estaba en 2.88%.

Actualmente Banco de México está trabajando de manera neutral, es decir, que no tiene efectos en las variables reales. Desde el año 2017 ha tratado de tener una política monetaria restrictiva, pero actualmente está dando un empujón al ciclo económico, por lo que se espera que no tenga efectos adversos en la economía.